“Los docentes de hoy, no innovan, no estudian y ni siquiera saben qué son las metodologías activas”
Corría el año 2021, me encontraba en un encuentro de maestros, diseñado para el colegio en el que me encontraba trabajando en ese entonces, allí quien hacía las veces de ponente nos hablaba de las metodologías activas, de qué se trataban y cómo estas impactan positivamente en la educación, ese día se nos presentó una tabla de Excel en donde mostraban algunas de ellas, y lo que decían algunos referentes teóricos al respecto. No obstante, me quedó resonando una frase que dijo esta ponente en donde afirmaba: “Los docentes de hoy, no innovan, no estudian y ni siquiera saben qué son las metodologías activas”.
Salimos de este encuentro, mis compañeros profes y yo, metimos la información que allí vimos, en donde nuestros estudiantes guardan la info de nuestra clase que no les interesa, ni les impresiona: ¡exacto!, en la memoria de más corto plazo.
Luego, pensaba solo en mi apartamento, que a lo mejor la temática que allí escuchamos no estaba mala, puesto que como profes es obvio que debemos abordar estos temas, dialogar y discutir sobre ellos, el gran problema estaba en cómo esto se estaba llevando a cabo.
Es decir, nos encontrábamos frente a alguien que nos hablaba sobre las potencialidades de la pedagogía, sin hacer uso de esta y con todo y su descaro o cinismo, afirmándonos que “Los docentes de hoy, no innovan, no estudian y ni siquiera saben qué son las metodologías activas”.
Pero ¿saben qué…?
Una de las grandes situaciones a las que como docentes nos enfrentamos diariamente hace referencia a la gran cantidad de información, contenidos y demás aspectos que sabemos y conocemos sobre nuestras asignatura, pero que, sin embargo, no somos capaces de llevar al plano del aula o espacio de aprendizaje de una manera dinámica, innovadora o que sencillamente pueda impactar en la vida de los estudiantes.
Es más, nosotros lo sabemos y este discurso no es nuevo, nosotros queremos impactar con nuestro conocimiento y desde nuestras áreas en la vida de los estudiantes, hacerlos crecer como personas y en sabiduría, es por ello que también somos conscientes de que para impactar en nuestros muchachos es necesario llegarles a la emoción, es decir, identificar en ellos de qué manera, puede el tema del que les estoy hablando activar su interés y por ende, iniciar, continuar o reforzar la construcción de un conocimiento específico en él.
Para lograr esto, desde la neurociencia, hay gran cantidad de elementos que como docentes podríamos aplicar, pero también sabemos que, para ello, se requiere estudiar, leer bastante y dedicarle espacios de indagación cuasi científica sobre el funcionamiento del cerebro humano y son acciones de comportamiento neuronal y psicológico que no se aprenden en lo que demora un video de tiktok.
Para nosotros, como docentes, que nos encanta poder adentrarnos en los aspectos procedimentales y que conocemos las necesidades reales de la educación, junto a los problemas que cada día aquejan a esta, lo que requerimos es una idea, un punto inicial y un empujón sobre cómo, desde los procedimientos podemos alcanzar resultados diferentes, innovadores y creativos, porque para esto, sí que somos buenos: para hacer diferente el mundo y para apostarle a nunca dejar de creer en la creatividad, innovación y conocimientos que en este mundo se puede construir.
Por ello, he decidido hacer a través de esta guía metodológica, un compilado 10 metodologías activas que me han dado resultado en mis clases, que demuestran cómo estas pueden ser aliados estratégicos para la transformación de los espacios de construcción de saberes y al mismo tiempo, pueden servir de referentes para mis compañeros profes.
Con esta guía no tengo pretensión en brindar la biblia, ni el libro de la sabiduría para orientar la clase perfecta, pero si, de alguna manera, brindar el paso a paso que nosotros como profes buscamos tener más claro en la implementación de diferentes metodologías activas que podemos usar en los ambientes escolares para activar la sabiduría de nuestros muchachos.
De paso, para que dejemos de mirarnos las caras cuando estamos en encuentros pedagógicos y escuchar a otros pedagogos que no entran a los espacios de aprendizaje, (llamados comúnmente “salones de clases”) decir: “Los docentes de hoy, no innovan, no estudian y ni siquiera saben qué son las metodologías activas”.
Descarga aquí la guía de las 7 Metodologías Activas
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